Hacía ya mucho tiempo que no nos brindaba la factoría mutante un crossover donde se viesen implicados todos los mutantes de la Marvel… y además bien llevado. Cierto es que todos los mutantes se reducen a 198 desde que a la Bruja Escarlata se le ocurrió aquello de «No more mutants»… O tendríamos que decir 199, a raiz de «Complejo Mesías». El caso es que el crossover (que ahora está publicando Panini en las cuatro colecciones) ha dejado un buen punto de partida para las series mutantes, a las que hay que sumar una serie para Cable, y las dos series regulares que ya tiene Lobezno y que van a su bola, sin nada que ver con lo que se relata en las demás. De hecho, New X Men cierra para dejarle paso a X-Force vol.2, pero el número de series se mantiene… y eso se agradece. Pues este nuevo punto de partida se denomina «Divided we stand», y bajo este sello aparecen las distintas colecciones mutantes. Voy a repasar hoy la serie madre, uncanny X-Men, en lo que se ha publicado hasta el momento en USA. Desde aquí, mi más eterno agradecimiento a La Novena Dimensión, por el trabajo que desarrollan, permitiéndonos disfrutar de las series americanas. Así que a partir de ahora…
MEGASPOILER

Uncanny empieza con un equipo creativo que se ha currado bastante el tema. Los guiones siguen siendo de Ed Brubaker y los lápices de Mike Choi, coloreados por Sonia Oback. A pesar de que es la serie más flojita de Brubaker (a éste hay que seguirlo en Capitán América, colección de la que está haciendo una verdadera obra maestra, o incluso en Daredevil), no deja de sorprender el cambio de rumbo que han tomado los personajes. Además es tremendamente creible y coherente la relación entre Emma y Scott, cosa que hasta ahora era un tema que estaba un poco en suspenso, por si ella se vuelve mala otra vez o yo que sé. Decir que el dibujo de Choi es una delicia, es quedarse muy corto. Cada página es un entretenimiento visual de detalles, composiciones y líneas en las que perderse, independientemente de la trama. Sólo por el dibujo ya merece la pena comprar el comic. En cuanto al guión, sigo manteniendo que es lo más flojito de Bru, aunque es lógico pensar que la franquicia mutante pesa, y que no tiene entera libertad para hacer lo que él es capaz de realizar. 495. Comienza con Emma y Scott pasando unos días en la Tierra Salvaje (yo creo que las agencias de viajes mutantes tienen paquetes con descuentos para este sitio) e inmediatamente un flashback donde Scott le dice a Iron Man que pasa de la iniciativa y que los X-Men ya no existen. Por otro lado, Kurt, Piotr y Logan están saliendo de Alemania y camino a Rusia, pasando un tiempo de reflexión. Emma y Scott protagonizan una verdadera novela rosa, mientras el Ángel en San Francisco, presencia como la ciudad sufre una regresión a los años 60-70 y avisa a Cíclope.
496. Coloso, en compañía de Kurt y Logan, visita la tumba de sus familiares. Luego van a tomar algo y se meten en una pelea de bar para defender a su dueño de un asalto de mafia local, mientras que San Francisco todo es «haz el amor y no la guerra». En ese punto llegan Cíclope y Emma, a tiempo de ver que sobre la ciudad está un celestial y detectar un pulso que es el causante de la regresión. Alguién en Moscú ha detectado la llegada de mutantes y se alegra, porque «ha pasado mucho tiempo desde que el cuarto rojo no tenía mutantes para jugar». 497. Androides gigantes, pertenecientes al cuarto rojo capturan a los tres hombres X y son interrogados sobre el por qué de la desaparición de los mutantes rusos en el Dia M, en tanto que ellos conservan los poderes. Mientras, la causante del pulso en San Francisco (la diosa) detecta a Scott y a Emma y los cerca, poniendo mentalmente a la policía tras ellos.

498. Flashback de la llegada de la diosa a San Francisco y como lo cambió todo. Los tres mosqueteros se liberan de sus captores, para verse frente a frente con Omega Rojo. La Diosa, que se llama Martinique, envía contra la pareja Summers a los mutantes que ya controla mentalmente, es decir, Hombre de hielo, Ángel, Hepzibah y Sendero de guerra. 499. Lucha final. Lobezno, Coloso y Rondador dan cuenta de Omega Rojo, mientras Cíclope y Emma consiguen dominar la situación y devolver todo a la normalidad, siendo agradecidos por la alcaldesa de San Francisco en persona e invitados a quedarse allí. Aunque Martinique Wyngarde consigue escapar y es reclutada por la hermandad.

CONCLUSIONES PERSONALES
Parece que el virus «BND» se expande por el universo marvel. Contar esta historia en cinco números es estirar el chicle para cuadrar el tomo, a la simple espera de la llegada del número 500, donde se presentará la nueva situación, es decir, que han cogido los bártulos y se han ido a San Francisco. Evidentemente, al final, nadie sabe que pinta el celestial que vió Emma, al margen de la gratuidad de la aventura rusa de Lobezno, Coloso y Rondador. Eso sí. Que bonito los números, salvo el 499, donde se nota la entrada de Ben Oliver como co-dibujante y Jasonn Keith como co-colorista, lo que me da a pensar que la pareja Choi-Oback no es muy rápida. Total, que se nota bastante la caida de calidad.
POZI,SIN MÁS.JAJAJAJAJAJA.
¿Tú leiste algo de la Patrulla X, cuando eras peque?